Creer que la dueña de tu vida
es una institución sin sentimientos.

Ya no soy la niña que mira
correr las gotas de lluvia
por la ventana del coche
y juega con muñecos del trastero.

Indiferente y ajena
a la injusticia y al odio.

Ya no vivo para nadie.
Ni me escondo por miedo.

Si tengo voz y grito
es porque hoy puedo,
y lo hago por todas
las que no pudieron.


@sofiarastelli.writes
8 marzo 2
Published:

8 marzo 2

Published:

Creative Fields